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El niño atendido en urgencias ha de beneficiarse de los mejores recursos pediátricos y quirúrgicos para poder sobrevivir, curarse y rehabilitarse. Sin embargo, las estructuras hospitalaria y académica no siempre persiguen la optimización de dichos recursos. La necesidad de continuidad asistencial a lo largo de las 24 horas del día impone una disponibilidad física del personal que es casi siempre incompatible con la experiencia.
Los servicios de urgencias se encargan, en proporciones muy altas, de la asistencia hospitalaria y también de la extrahospitalaria. Por la Urgencia de un hospital pediátrico pasan a menudo centenares de pacientes cada día y no cabe duda de que un manual de procedimientos facilite su manejo.
Este libro que tiene el lector entre manos es una prueba de que especialistas pediátricos han desarrollado a fondo un cuerpo de doctrina sobre los procedimientos en urgencias donde se compendia todo lo necesario.
Tras una parte introductoria en la que se describen los preparativos necesarios para llevar a cabo limpiamente y en las mejores condiciones los diversos procedimientos, se han ordenado estos alfabéticamente para facilitar la consulta en el momento de su aplicación clasificándolos por su urgencia y complejidad. Una inspección del índice revela que, aunque muchos procedimientos son quirúrgicos, otros muchos son pediátricos instrumentales. Aquí se recorre desde la sutura de una herida hasta la intubación endotraqueal pasando por la punción lumbar y la desfibrilación.
Esta obra ofrece una propuesta particular por cuanto, de manera práctica, describe procedimientos que se usan habitualmente, con ilustraciones y fácil búsqueda de los temas. Estas características lo colocan en un lugar preferencial dentro de la bibliografía de todo aquel profesional de la salud vinculado a la pediatría y sus urgencias.
El sitio web complementario incluye las figuras en color del libro, videos y animaciones sobre anestesia troncular, canalización venosa, drenaje pleural, taponamiento nasal, intubación endotraqueal, colocación de sonda nasogástrica y vesical, e inmovilizaciones, entre otros.
En los momentos críticos de una urgencia pediátrica se suman diversos factores, como la disparidad de patologías en relación con las distintas edades, las características psicofísicas del paciente, y las particularidades de su familia y del personal de salud que interviene. Ante esta realidad, es importante contar con elementos facilitadores para la atención, como lo es una guía práctica y descriptiva de los procedimientos de urgencia.
Los procedimientos pediátricos consisten en una serie de pasos comunes, con demostrada eficiencia, y que permiten realizar las acciones de manera correcta.
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